domingo, 6 de octubre de 2013

UNO MÁS



Eran  sobre las ocho y de media de un día frío de invierno muy frío,las calles estaban vacías,yo acababa de salir de trabajar e iba hacia mi casa,cuando de repente escuché un ruido, bueno no fue un ruido, fue como un bebe llorando y escuché a alguien correr y fui hacia el ruido. Cuando llegué era un bebé de apenas dos meses, lloraba y lloraba,y pensé que le habían abandonado. En aquel momento me sentí confusa, no sabia que hacer y decidí llevármelo a mi casa.
Cuando llegué me senté en el sofá. Estaba como en estado de shock, no sabía qué hacer. Él lloraba y lloraba,tendría hambre pero no tenía nada que pudiese darle así que decidí dormirlo, ya que estaría tan cansado como yo.Esa noche apenas pude dormir,se me pasaban mil cosas por la cabeza.
A la mañana siguiente fui a comisaria y le conté lo ocurrido,ellos a allí le llevaron a un centro de menores.
Después de un largo día lo único que hice fue pensar en él. Al día siguiente fui a verle y estaba muy bién. Me quedé más tranquila pero el niño no salía de mi cabeza.
Pasados tres días decidí adoptarlo,y hoy celebramos su quinto cumpleaños en mi casa.
(Cantan todos)-Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz....
-Muchas gracias. (dice agradecido el niño)


De: Sara Luisa García Martinez n.4 3A