martes, 27 de abril de 2010

``Antes de nada´´

Hay veces, en las que pensamos que no nos pasa nada interesante, eso es lo que piensa Carla. Una chica normal, que quiere que su vida de un giro de 180º, o al menos de 10º. Esa noche está en su cama, abrazada a su almohada, piensa en ello. A veces la cama resulta un poco incómoda cuando pensamientos tan difíciles te rondan por la cabeza, y más si tienes 15 años, supongo, que una de las edades más difíciles.

-Tengo que hacer algo. -piensa-. O conocer a alguien, que me haga sentir especial.

Y con este último pensamiento se queda dormida.

A la mañana siguiente va a colegio, para variar. Pero lo que Carla no sabe, es que es pequeña, todavía tiene cosas que vivir y sueños que cumplir; no sabe que la persona que le hará sentir en las nubes, puede estar lejos o a la vuelta de la esquina, nunca se sabe.

Carla se lo cuenta a sus amigas, esperando que la entiendan y le puedan dar algún consejo:

-Chicas, ¿vosotras no tenéis la sensación a veces de que os falta algo? ¿ de que es siempre lo mismo?

-Pues no... -contestan ellas divertidas-. Ya pasará Carla.

Pero no, ella no está satisfecha, no la entienden, lo sabe.

Otro día más, una tarde, una noche. Como siempre, sin nada que hacer sin nada que experimentar.

Ese día está más depresiva que nunca, es su semana fea, su día feo. Intenta decírselo a su madre, esperando también que la entienda, pero le da vergüenza, siente y piensa que no la entenderá. Pasa, pasa de todo. Se va a dar una vuelta, pasea por el parque, por el centro, por todos sitios, y, al cabo de un rato, mira esperanzada la hora, esperando que sean al menos las 8 y media, para que se vaya a cenar y acabe un día más.

-¡No por favor! ¡¿Las siete y media?! No, no, no.

Entonces es cierto, está comprobado, cuando quieres que algo se acabe, el tiempo pasa despacio. Lo que le recordó a una canción de La Oreja de Van Gogh, pero la antigua, la nueva no le gusta.

Y pensando va volviendo a casa, y se choca con alguien, ella no lo sabe, pero quizás con quien se ha chocado, puedes ser el principio. Porque siempre es el principio de algo; nunca nada es igual.

Y ella siente algo, pero sin saber que, vuelve a casa, esperando, otra vez, un día más.

Y es que antes de nada debemos pasar por muchas cosas, por muchos momentos y ella solo tiene 15 años. Ahora es cuando comprende perfectamente. Y esa frase que le dijeron sus amigas le llega, le llega en ese momento: ``Ya pasará´´ y es verdad, ya vendrá, ya llegará.

Y con esa idea, y ese fluido nuevo, regresa a casa, esperanzada de que la vida tenga algo preparado para ella.
 
 
 
Carmen Mª Mullor Martín. 3ºD nº22